Vamos al grano.
Has revisado tu escritura o el recibo inicial de la hipoteca y te has llevado las manos a la cabeza. Hay un cargo ahí, a menudo de cientos o miles de euros, llamado “Comisión de apertura”.
Te huele mal. Y tienes razón.
Si estás leyendo esto, es porque quieres recuperar tu dinero. Quizás eres un particular harto de abusos, o quizás eres un compañero abogado buscando una plantilla fiable para ahorrar tiempo.
Bienvenido. Aquí vamos a lo práctico.
En estas líneas te voy a explicar cómo lanzar el primer aviso al banco. Ese “requerimiento extrajudicial” que enviamos por email.
Rápido, barato y efectivo. También te contaré qué esperar cuando te respondan (porque seguramente te responderán, aunque sea para decir tonterías).
En este despacho trabajamos a pie de obra. Mi padre y yo pisamos los juzgados a diario. Sabemos cómo respiran los bancos y, sinceramente, preferimos que el dinero esté en tu bolsillo antes que en sus balances.
Nuestra filosofía es simple: si te enseñamos a dar el primer paso, tú ganas confianza y recuperarás todo o parte de lo que es tuyo. Si ayudamos a otros compañeros a agilizar trámites, descongestionamos un poco el sistema. Todos ganamos.
Solo te pido un favor a cambio: lee esto con calma antes de llamar al despacho.
¿Por qué? Porque el teléfono suena mucho y a menudo estamos en sala defendiendo a alguien como tú. El email, sin embargo, es sagrado y siempre lo revisamos.
Así que, lee, actúa y si luego necesitas que nos pongamos la toga por ti, escríbenos. Ahorrar tiempo es ganar vida.
Seamos claros: el banco mira por su negocio, no por tu bienestar.
Pero la Ley nos pide que seamos “buena gente” antes de demandar.
El email que vas a enviar no es para pedir un favor. Es una advertencia.
Es tu forma de decirles: “Sé que me han cobrado por un servicio que no me han prestado. Europa (el TJUE) dice que eso es abusivo. ¿Me devuelven el dinero por las buenas o nos vemos en el Juzgado con las costas?”
Este trámite es vital por dos razones:
Olvídate de escritos barrocos de 20 páginas. Necesitas ser conciso y atacar el punto clave de la comisión de apertura: que te cobraron por un servicio que no existió o que no te explicaron.
¿A quién se lo mando? Localiza el email del Servicio de Atención al Cliente (SAC) de tu entidad. Google es infalible para esto.
Una vez lo tengas, usa este modelo:
Nombre y apellidos:
DNI:
Dirección completa:
A la atención del Servicio de Atención al Cliente
En (Ciudad), a (Día) de (Mes) de (Año)
ASUNTO: Reclamación extrajudicial de la comisión de apertura y restitución de cantidades.
Estimados Sres.:
Por medio del presente escrito, me dirijo a Vdes. en calidad de titular del préstamo hipotecario suscrito con su entidad, para solicitar formalmente la declaración de nulidad de la cláusula que impone la comisión de apertura y la devolución íntegra de lo cobrado por su aplicación.
La mencionada cláusula infringe la normativa de protección de consumidores y usuarios, así como la reciente jurisprudencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) y del Tribunal Supremo. En concreto:
- Falta de servicio real: la entidad no ha acreditado, ni en la oferta vinculante ni en el contrato, que dicha comisión responda a un servicio efectivo o a un estudio de solvencia real y singularizado que justifique tal coste adicional, más allá de lo que ya retribuye el tipo de interés.
- Falta de transparencia: la cláusula fue impuesta sin la información necesaria para comprender su alcance económico y jurídico, generando un grave desequilibrio en perjuicio del consumidor.
Por todo ello, les requiero para que procedan a:
- La devolución inmediata de la cantidad de [IMPORTE EXACTO DE LA COMISIÓN] € cobrada indebidamente.
- El abono de los intereses legales devengados desde el momento del cobro hasta la fecha de la restitución.
Quedo a la espera de su respuesta. De no atenderse esta petición amistosa, o de recibir una respuesta insatisfactoria, pondré el asunto en manos de mi dirección letrada para iniciar las acciones judiciales oportunas, solicitando además la condena en costas para la entidad.
Adjunto copia de mi DNI, por ambas caras.
Atentamente,
Nombre y apellidos:
Listo. Rellena los huecos, pon la cantidad exacta (mira tu escritura) y dale a enviar. Tu parte está hecha.
Ahora toca esperar. Y aquí es donde tienes que tener la cabeza fría.
El banco sabe que con la comisión de apertura lo tiene difícil. Tienen que demostrar que hicieron un trabajo extra para cobrarte eso, y casi nunca tienen pruebas.
Suelen pasar dos cosas:
Ojo con las ofertas. Casi siempre te ofrecerán menos de lo que te deben. Si la comisión era de 1.000€, igual te ofrecen 400€ “por molestias comerciales” o a cambio de firmar un papel donde renuncias a reclamar nada más en el futuro.
Lo hacen porque juegan con tu prisa. Saben que 400€ hoy son tentadores frente a 1.000€ (más intereses) dentro de un año o año y medio tras el juicio.
Es tu decisión.
Es una cuestión de matemáticas y de paciencia. El banco apuesta a que tienes miedo a los líos o necesidad de dinero rápido. Intentarán comprar tu renuncia barato.
Tú decides si aceptas el “mal acuerdo” o peleas por el “buen juicio”. Nosotros, como abogados, siempre recomendamos pelear lo que es justo, pero entendemos que cada casa es un mundo.
Ya tienes las herramientas. Mandar el email es gratis y no compromete a nada.
Lo complicado no es el papel, es aguantar el pulso cuando el banco intente regatear. Has sido elegante, les has dado una oportunidad. Si la desaprovechan o te quieren dar migajas, no te preocupes.
Ahí es donde termina la fase amable y empieza la nuestra. La de los tribunales.
Lo que escribas aquí lo leerá un abogado, no un comercial. Si creemos que podemos ayudarte, te lo diremos. Si hay otros que te pueden ayudar mejor, te lo diremos.
No nos gusta perder el tiempo ni hacérselo perder a los demás. La decisión es tuya.
