SOBRE ESTE CASO
En 30 segundos
La publicidad agresiva y la venta de productos de todo tipo mediante anuncios, es una mezcla que a muchos llama al consumismo y en otros causa rechazo por la evidente falta de sutileza que en ocasiones incluso conlleva cierto engaño.
Todos los bancos han ofertado este tipo de tarjetas, prometiendo una gran cantidad de ventajas que han terminado siendo una trampa, como en el caso que te contamos hoy.
Puedes acceder aquí a la sentencia: Sentencia de 25 de marzo de 2021 Juzgado de Primera Instancia 16 de Las Palmas contra Bankinter
Tarjetas de teletienda
Las financieras que salen en televisión e internet también usan este modo de vender. Aparentemente inocuo y con un bajo riesgo en el que todo parecen ventajas, pedir un crédito es fácil y rápido. Pero sin garantía de dos años ni posibilidad de devolución.
¿Qué sucede si eso mismo nos lo ofrece un banco?, ¿sus productos son más fiables?, ¿hay más motivos para confiar en nuestra sucursal de toda la vida que en unos desconocidos que nos venden a través de internet o la televisión?
Mismo perro, distinto collar
Los bancos también se subieron al carro y no hay ninguno que ofrezca más seguridad y más transparencia que cualquier financiera de créditos rápidos.
Tenemos ejemplos de intereses usurarios procedentes de todos los bancos. A la cabeza están Santander, CaixaBank y Bankinter, de este último es la sentencia conseguida que publicamos hoy.
Conseguimos cancelar la deuda que tenía el afectado y además recuperó un importe de 1.952,19 €.
“El dinero siempre está ahí; sólo cambian los bolsillos” dijo con mucha razón Gertrude Stein. Y nuestra misión es que vuelva al bolsillo de los afectados.
